La obra en bronce del gran escultor francés del siglo XX, no solo refleja maestría técnica, sino también la capacidad para expresar tensión y equilibrio a través de la forma escultórica.
La escultura de bronce de casi cuatro metros de altura, que representa uno de los principales seres mitológicos, está ubicada desde 1914 a metros de la entrada del Museo Nacional de Bellas Artes.