Las catedrales etéreas y espectrales del artista italiano fueron la gran atracción escultórica del festival de arte y música Coachella (2018), en el desierto californiano.
Sus impactantes obras logran desmaterializar y subvertir el lenguaje arquitectónico clásico, a partir de los elementos de alta carga metafórica y expresiva con los que realiza su práctica escultórica.