La escultura del artista francés despierta una serie de sentires en torno al acto universal del amor. Entre la forma y la materia, como es su composición en el espacio y su relación con otros besos icónicos en la historia del arte.
Precursor del expresionismo, fue el pintor del amor, los celos, la muerte y la tristeza. Considerado el más grande de los artistas noruegos, su obra El beso desdibuja la individualidad de dos amantes en una fusión absoluta.