Figura clave en la vanguardia rosarina de los sesenta, su instalación construye un equilibrio precario, como el social, con tensiones donde la forma abstracta propone lecturas políticas.
Figura clave de Tucumán Arde, el artista santafecino llevó su búsqueda estética al límite en 1967, en una obra en la que coinciden geometría abstracta, juegos perceptivos y resonancias políticas.
Pionera del arte conceptual, sus ideas con destino efímero eran como pensadas para escapar del fetichismo. Hacer obras para poder escribir manifiestos al margen del centro.