La obra del norteamericano, uno de los grandes innovadores de la fotografía contemporánea, combinó imagen con narrativa escrita, dando lugar a una obra introspectiva, cargada de simbolismos.
Mediante lenguajes digitales o analógicos trabaja distintos formatos, incluyendo video, fotografía, intervenciones urbanas e instalaciones. Una búsqueda de lo poético en el error, el límite y la transformación.
Su producción, que atraviesa la estética kitsch y se para entre lo queer y lo trash, abarca la pintura, el dibujo, la escritura, el collage, la fotografía, el gif, el tattoo y la instalación.
Junto a un legado de miles de fotografías en el Archivo Fotográfico Martín Chambi en Cusco, es una de las obras más emblemáticas del primer fotógrafo indígena que retrató el mágico universo andino.
Con un lenguaje visual propio en el que se destacan la fotografía, el bordado y la inteligencia artificial, la obra de Urquijo se presenta en torno a conceptos como el fenómeno de la vida y el paso del tiempo.
Borrando cualquier frontera entre reproducción y original, sus manipulaciones visuales hacen difícil descifrar qué fue primero, si las fuentes o la apropiación.