Nobuyoshi Araki: escenas de la vida conyugal  

Del registro del amor con su esposa hasta la denuncia por parte de una de sus musas, la obra del fotógrafo japonés condensa poderosos momentos de crudeza y erotismo. 
Por Fernando García

 

El prodigio nerd estrella de un concurso de preguntas y respuestas llega al momento de mayor tensión y dramatismo posible en este género propio de la tevé. Masacrado por las luces y solo ante millones de telespectadores ansiosos inducidos por la técnica persuasiva del interrogador es que recibe la famosa pregunta del millón: Ahí va. No tiene opciones. Nombre de un artista que hizo de su intimidad con una mujer japonesa llamada Yoko una obra de arte. ¿Lennon, John Winston?, dirá con la desconfianza e incertidumbre que causa aquello que se supone un regalo envenenado.

Y la respuesta es que no, que tendría que haber nombrado a Nobuyoshi Araki (Tokio, 1940), el fotógrafo que conoció en 1968 a la ensayista Yoko Aoki con la que se casó en 1971 y cuya intimidad como pareja dejó registrada muy pronto en el foto-libro Sentimental Journey que viene a ser, un poco, también, lo que John y Yoko hacían en la cama cuando los fotógrafos dejaban las habitaciones de Amsterdam y Montreal donde montaron su Bed Peace (“Encamada por la paz”). Una mezcla del Revuélquese y viva de Marta Minujín, el Norman Briski de La Fiaca y la decisión del escritor uruguayo Juan Carlos Onetti de mudar su escritorio, biblioteca, cenicero y alambique de whisky a la cama. 

 

0001.jpg

Yoko Aoki en el foto-libro Sentimental Journey.

 

En Sentimental Journey, Araki ponía en marcha un registro que pronto elevaría la pregunta (otra pregunta del millón) de si lo suyo era arte o pornografía, pero también una estrategia propia en el foto arte con una incesante edición de libros (en el registro de diarios con imágenes) bastante antes de que los cofee table books (con la editorial Taschen a la cabeza) fueran la plataforma consagratoria de los fotógrafos. Tanto o más que las exposiciones. Araki entendió que ese era el vehículo y entre 1972 y 2017 publicó unos 350 títulos incluyendo las antologías de Taschen, Phaidon o instituciones como la Pinacoteca de Munich. Sentimental Journey tuvo una segunda edición en 1992 con la muerte de (la otra) Yoko en 1990, víctima de un cáncer de ovarios. Araki reunió entonces las escenas de intimidad erótica con la progresiva decadencia del cuerpo al que había amado toda su vida. Made in Japan

 

 Sentimental Journey. Edición japonesa, 1991, Shinchosha Publishing.

 

Su modelo más reconocida es acaso Björk, la díscola sirena islandesa que asumió en su cuerpo menudo y garganta poderosa las transiciones entre la composición contemporánea, la electrónica y la canción pop. Araki la retrató para la portada de Telegram (1996), su primer álbum de remixes. Apenas una franja de luz se posa sobre el parietal derecho de la cara en claroscuro con el tono azulado del resto, una luz mortecina de karaoke roto, turbio. Lady Gaga reclamaría sus servicios años después. 

 

d.jpg

Portada del álbum Telegram (1996) de Björk.

 

Pero la modelo que puso a la lente erótica de Japón en la primera plana fue Kaori, su musa durante 16 años. Envalentonada por el tsunami feminista del #Metoo, la mujer abrió el fuego mientras el Sex Museum de Manhattan celebraba la obra del fotógrafo con la exposición The Incomplete Araki. En una entrada de su blog en 2018 hizo público el maltrato de Araki: nunca firmaron contrato, su imagen era explotada sin permiso, no respetaba su privacidad durante las sesiones. 

 

0020.jpg Kaori, 2001-2008.

 

En la nota del New York Times que se hace eco de la denuncia se puede ver un retrato de Araki. Lleva puesta una remera con una foto suya de Kaori como quien lleva puesta su propia obra encima. Sin cargo alguno por acoso sexual el maestro japonés acaso incurrió en abuso de copyright: hizo de Kaori su objeto, una geisha de autor. El Sex Museum decidió incluir las declaraciones de la modelo junto a las fotografías (la forma de suave hipocresía que echan a mano las instituciones para afrontar la sensibilidad ambiente) pero no cedieron a su ambición de co-autora, de ser, oh no, la nueva Yoko.   

 

 

 

 

 

 

LOGO FOOTER

Contacto: info@elojodelarte.com
elojodelarte.com ® Una plataforma de LittleBull Prod. © 2025 Todos los derechos reservados.

Este sitio cuenta con el auspicio de Buenos Aires Ciudad

Este sitio fue declarado de interés cultural por la Honorable Cámara de Diputados de la Nación y la Legislatura Porteña