Nacida en Buenos Aires aunque nunca exhibió en el país, la artista es mundialmente conocida por sus enormes telones de abstracción lírica y geometría blanda.
En la hora cero de la performance, el neodadaísta que entendió el arte expandido de sus límites, tomó un conejo sin vida como metáfora del acto humano de pensar.
Pionero del conceptualismo latinoamericano, anticipó el uso de un fruto de la naturaleza como obra de arte. De cómo sus papas y cables se volvieron una pieza de música electroacústica.
La pequeña impresión captura lo que ninguna de sus grandes instalaciones: un pedazo de cielo azul y un sol resplandeciente, algo muy parecido al misterio insondable de la poesía.
Open Wound, la instalación a gran escala de la joven artista coreana, es un monstruo que consigue hacernos espectadores de la posthumanidad y de las ruinas industriales al mismo tiempo.
Sean planos, mapas o latas de aceite, la dimensión proyectual de la disciplina es propuesta en sus obras como gesto inestable. El conceptualista que cruzó los límites entre arte y arquitectura.
Del registro del amor con su esposa hasta la denuncia por parte de una de sus musas, la obra del fotógrafo japonés condensa poderosos momentos de crudeza y erotismo.
Meditaciones matinales en modo micro-cine continuado, por parte de la gran pintora que en los años 60 formó parte del grupo que revolucionó la percepción artística de la Argentina.
El colectivo danés plantea la idea de una realidad post-apocalíptica después de la humanidad en el mundo. Un giro distópico que imagina la continuidad de todo lo que nos rodea sin nosotros.
Los paisajes impresionistas de sus pinturas ya no representan la idea popular capitalista de robar un banco, sino directamente la fantasía vandálica de quemarlos.