De instalaciones lumínicas en sitios específicos a colaboraciones con Massive Attack, sus dispositivos informático-artísticos son el oscuro reflejo de los estímulos de una comunidad tecno-vigilada.
El nuevo parque de esculturas de la bodega Xumek en el Valle de Zonda sanjuanino, posee inusuales intervenciones de sitio específico a cargo de importantes artistas argentinos.
La instalación ubicada en el microcentro porteño es una metáfora del tiempo suspendido con una potente carga conceptual. Un silencio entre el ruido urbano para que la ciudad piense.
Su práctica explora la espacialidad y la interacción, trabajando en paisajes, instalaciones, objetos, acciones, y textos. El arte y el territorio se encuentran para imaginar nuevas formas de habitar y percibir.
Artista multidisciplinar que entrelaza la danza contemporánea, las instalaciones performáticas, las artes visuales, el diseño industrial y la tecnología.
Pionera del arte conceptual, sus ideas con destino efímero eran como pensadas para escapar del fetichismo. Hacer obras para poder escribir manifiestos al margen del centro.
Su obra se enmarca en la intersección entre arte, tecnología y materialidades residuales. Esculturas, instalaciones y medios digitales, con los que explora los límites entre lo humano y lo tecnológico.
El artista francés no recrea la naturaleza, la emula mediante dispositivos, donde lo humano y lo maquínico se confunden. Una oda a la subjetividad digital y al animismo de los datos.
Su obra, interesada en los procesos de configuración de la subjetividad, ha impactado en la fotografía, la instalación, el video y la performance por los últimos veinticinco años tanto a nivel nacional como internacional.
La realizadora londinense dirige un ballet abstracto de poesía cinética con objetos inanimados. Un cortometraje con música de Debussy que desborda emoción mecanizada.