Diego Cienfuegos nació en Buenos Aires en 1974. Se graduó en la escuela de Artes Lola Mora y en la Universidad de Buenos Aires en Arquitectura. Luego de completar sus estudios comenzó su carrera laboral en el estudio Mario Roberto Alvarez & Asociados, especializándose en Diseño arquitectónico. Participó en numerosos concursos entre los cuales se destacan: 1er premio (seleccionado) para Buenos Aires Concurso CHACARITA – LACROZE (2000); Mención Honorífica en Santiago de Compostela, concursando en la segunda fase del concurso CHACARITA – LACROZE con 27 estudios internacionales (2000); Mención Honorífica Concurso de Ideas para el Área Nuevo Colegiales (2001); Selección Concurso de Ideas Plaza del Vaticano (2001); 1er premio Concurso de Ideas Plaza de la República (2001); Mención Honorífica Concurso de Ideas Centro Cultural Kónex (2003). En 2005 funda su propio estudio de arquitectura, especializado en vivienda y arquitectura comercial de gran escala. Paralelamente retoma la actividad artística para dedicarse de lleno a partir del 2020. Fue finalista de la Bienal de Arte Sacro Contemporáneo 2023, Centro Cultural Recoleta. Su última exposición individual fue: Guardatemplo, curada por Julio Sánchez Baroni en Vitriol en Expansión (2023).
1 ¿Principal rasgo de tu carácter?
Estoico y hedonista a la vez.
2 ¿Tu principal defecto?
Tener etapas de misantropía y ostracismo.
3 ¿Tu ideal de felicidad?
Crear, aprender, entrenar. Vivir en conexión con la naturaleza.
4 ¿Tu artista preferido?
Bach.
5 ¿Un héroe / heroína de ficción?
Ulises de la Odisea (el solo quería llegar a casa).
6 ¿Cuál sería tu mayor desgracia?
Morir en vida, que todo me de igual, ser un nihilista sarcástico.
7 ¿Tu color favorito?
No prefiero ningún color sobre otros.
8 ¿Cómo te gustaría morir?
De pie escalando mi montaña.
9 ¿Cuál es el estado más común de tu ánimo?
Desde que me dedico con exclusividad al arte siento mucho entusiasmo, felicidad y agradecimiento, aunque pendula hacia otros estados por supuesto.
10 ¿Tienes una máxima?
Máximas aprendidas andando en bicicleta:
Aprende a reconocer cuando tienes el viento a tu favor, aprovéchalo!
Cuando lo tengas en contra atraviesalo sin querer enfrentarlo, agazápate y pedalea.
De vez en cuando incorporate y siente todo ese viento repeliendo tu rostro y tu cuerpo, te hará sentir vivo e insignificante a la vez.
Hay momentos de ritmo constante, momentos de sprint, otros de recuperar energías, solo tu conoces los recursos con los que cuentas. Ve a tu ritmo. Observa a tu alrededor. Disfruta el Viaje.